Treinta años conserbadores
A partir de 1858 se inició, bajo predominio conservador, una etapa de recuperación económica e institucional, que constituye uno de los períodos más sobresalientes de la historia de Nicaragua conocido como "Primera República Conservadora" o los Treinta años conservadores.
La economía, el desarrollo cultural y social, este último en menor medida debido a la desigualdad de clases, convirtieron al país en el más estable y rico de toda Centroamérica y en una de las mejores economías del continente americano, con un sólido régimen constitucional y una administración proba y austera de las finanzas públicas.
Todo esto provocó una nueva oleada de inmigrantes provenientes de Europa, principalmente de Alemania e Italia, lo que hizo florecer aún más la economía, mientras El Salvador, Honduras y Guatemala se mantenían en conflictos armados y en Costa Rica se daba una época de golpes militares.
Durante esta época se sucedieron en el poder Tomás Martínez Guerrero (1858-1867), Fernando Guzmán Solórzano (1867-1871), Vicente Cuadra y Ruy Lugo (1871-1875), Pedro Joaquín Chamorro y Alfaro (1875-1879), Joaquín Zavala Solís (1879-1883), Adán Cárdenas del Castillo (1883-1887), Evaristo Carazo Aranda (1887-1889) y Roberto Sacasa y Sarria (1889-1893).
En 1885, Nicaragua se unió a Costa Rica y El Salvador en una alianza militar para hacer frente a las pretensiones del Presidente de Guatemala Justo Rufino Barrios, apoyadas por el Presidente de Honduras Luis Bográn, de restablecer por la fuerza la unidad política centroamericana; pero las tropas nicaragüenses no tuvieron ocasión de entrar en combate, ya que Barrios murió en la batalla de Chalchuapa, poco después de haber invadido El Salvador. |